Quehacer madrileño

Madrid recibe muchos visitantes al cabo del año y cada uno tiene intereses específicos: está el que busca satisfacer su apetito cultural y, de camino, el gastronómico; también hay quien elige sus idílicos parajes naturales para practicar las más diversas actividades al aire libre, como senderismo, esquí, y cicloturismo.
Es posible disfrutar de la vida nocturna en cualquiera de sus terrazas o tomando un café en plena sierra. Si no quiere arrepentirse, debe estar atento a la agenda de fiestas de los diferentes municipios, repleta de citas todo el año, sobre todo si viene acompañado por niños. Los más pequeños pueden vivir un Madrid a su altura gracias a los parques de atracciones y otros centros de ocio que proponen actividades de todo tipo.
Los que van con la intención de conocer su legado histórico, debe tener en cuenta la riqueza monumental. Para ello, nada mejor que planificar una ruta por los Reales Sitios, edificios que fueron usados por los reyes de España como lugares de reposo, recreo y residencia.
Es uno más de los múltiples itinerarios que atraviesan la región. Y los amantes de la cultura deben recorrer el Paseo del Arte, con paradas en el Museo del Prado, el Museo Thyssen-Bornemisza y el Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía, tres de las pinacotecas más importantes del mundo.